El Santo de los agricultores, San Isidro Labrador, siempre ha sido venerado como el patrón de los trabajadores de la tierra. A lo largo de la historia, los agricultores han rezado a San Isidro para obtener una buena cosecha, y especialmente, para obtener una buena cantidad de lluvia.
El 15 de mayo se celebra el día de San Isidro y, para honrar al santo, muchas personas rezan una oración especial para pedir lluvia.
El Santo es venerado en muchos pueblos del mundo con procesiones en las que se bendicen los campos, por lo que este 15 de mayo, es cuando según los agricultores se abre el cielo y comienzan las lluvias, en algunas ocasiones desde este día se puede pronosticar si las aguas de la temporada van a ser buenas o no para el campo y sus cosechas.
Por lo regular este día llueve y los labradores encomiendan sus cosechas al santo para que les vaya bien durante ese año, pues sin agua no pueden producir.