El estruendo de la pirotecnia causa en los animales y principalmente en los perros afectación por estrés y un dolor tan intenso que puede provocar que se reviente el tímpano y que haya lesiones en el oído interno, también existe riesgo de infarto y derrame cerebral.
El oído del ser humano puede soportar sonidos de 70 y hasta 80 decibeles, lo que no ocurre con los animales que tienen más sensible el sentido auditivo y el estruendo de la pirotecnia puede alcanzar de 150, 180 y hasta 200 decibeles, ocasionando graves afectaciones en los animales.
Francisco Orozco Arredondo, Médico Veterinario, urgió la necesidad de que la ciudadanía tome conciencia de que los perros y todos los animales son seres vivos que aquejan severas afectaciones por la pirotecnia.
En ese sentido, hizo un llamado a las asociaciones protectoras de animales para que promuevan iniciativas que se hagan llegar al Gobierno Municipal o al Congreso del Estado para solicitar que se erradique la quema de pirotecnia.