Familiares de Mauricio Romero, socio del restaurante ´ Barra 1604´ y de Mario Hernández Cárdenas gerente del lugar, pidieron justicia y paz para Salamanca. En medio de los servicios funerarios, ambas familias platicaron con los medios de comunicación, pidieron no cámaras ni micrófonos, sin embargo, expresaron su dolor a través de las palabras.
La familia de 'Don Mario" como era conocido, aseguró que el regalo no era para él, pues iba a nombre de Mauricio Romero. Para la familia de Mario, él y Mauricio dieron su vida por los comensales y trabajadores del lugar; ya que sí el artefacto detonaba dentro del establecimiento las pérdidas hubieran sido aún más lamentables.
Por su parte, la familia del empresario conocido en Salamanca, pidieron un alto a la violencia, pidió que las autoridades de verdad hicieran su trabajo, Edgar Romero, hermano de Mauricio, destacó que no busca culpables ni tener problemas, sí pidió que regrese la paz a la ciudad y como lo dijo en su mensaje que se viralizó, "somos rehenes de ellos, una bola de miserables delincuentes, de políticos y funcionarios incompetentes".
Ambas familias consternadas por lo sucedido, pidieron privacidad, así como realizaron los servicios rodeados de amigos y allegados, en relación a amenazas o un cobro de piso, prefirieron no abundar en el tema. Además de que a las afueras de ambas casas funerarias, se notó la presencia de policía estatal a manera de protección de las víctimas