El ex-alcalde con licencia, César Prieto, quien abandonó su cargo para emprender una campaña por su reelección, parece haber dejado en segundo plano una de las principales preocupaciones de la ciudadanía: la seguridad.
Salamanca, una ciudad marcada por la violencia y los crímenes, continúa sin un director de Seguridad Pública, Tras siete meses de que renunciara Alejandro Flores; la ausencia de liderazgo en esta área vital ha dejado a la población vulnerable, enfrentando una ola constante de asesinatos que han sembrado el miedo entre sus habitantes.
Raymundo Gómez, presidente del Observatorio Ciudadano, expresó su pesar por la situación en Salamanca, lamentando la falta de coordinación y la escasez de recursos en materia de seguridad. La ausencia de un director de Seguridad Pública, junto con la deficiente presencia policial en las calles, ha contribuido al aumento de la violencia y la impunidad en la ciudad.La falta de acción por parte de las autoridades locales ha generado indignación entre los salmantinos, quienes claman por medidas efectivas para combatir la creciente delincuencia que azota al municipio petrolero