De nueva cuenta el rastro municipal suspendió matanza de reses y cerdos, lo que generó molestia entre los tablajeros ya que señalaron, no son avisados por la dependencia hasta ese mismo día por la mañana, por lo que se ven obligados a acudir a ciudades como Irapuato y Celaya a sacrificar o comprar los productos cárnicos, lo que les genera más gastos que ganancias.
Tablajeros dijeron ser conscientes de que el rastro tiene más de 15 años en operación, sin embargo, mencionaron que las autoridades municipales no deberían esperar hasta que falle la maquinaria, sino tener refacciones ya listas para cuando sean necesarias.
Hasta el momento la respuesta por parte de la Dirección de Servicios Públicos, ha sido que las líneas de operación en el rastro municipal se dañaron por descuido y falta de mantenimiento en administraciones pasadas, además de que el paro de actividades será hasta que encuentren las refacciones eléctricas y neumáticas de las piezas dañadas.