El posible cierre de las estancias infantiles, debido a la falta de subsidio por parte de bienestar, antes conocido como SEDESOL, alarma padres de familia; comentan que estas instituciones les son de gran ayuda al ofrecer sus cuidados a los niños, ya que ellos pueden dedicarse a trabajar, sin embargo, si cierran sus puertas tendrían que modificar sus labores al no tener con quién dejar a cargo a sus hijos.
Esto ha causado afectaciones en la economía de los padres, ya que han tenido que duplicar la entrega de la cuota mensual para las estancias, además de entregar despensa para las comidas de los niños.