Durante las festividades de Navidad y Año Nuevo, la venta de pirotecnia alcanzó un 60% y pese a considerar que la comercialización fue buena, el presidente de la Unión de Pirotécnicos Salmantinos, Joel Guerra Razo, reconoció que se vieron afectados por el llamado que hicieron las autoridades de Salamanca para evitar la quema de pirotecnia.
El dirigente de uno de los tres tianguis de pirotecnia que operan en Salamanca, comentó que también se vieron afectados por los operativos que se implementaron en municipios vecinos como Irapuato y Celaya, en donde se estuvo decomisando la pirotecnia a gente que año con año viene a esta ciudad para comprar juguetería pirotécnica.
Joel Guerra Razo, dijo estar consciente de que la pirotecnia genera mucho riesgo y que se registran muchos accidentes, sin embargo, también comentó que hay mucha gente que depende de este giro, tanto artesanos pirotécnicos que elaboran el producto, como quienes lo comercializan.