En el estado hay viviendas abandonadas, deterioradas y vandalizadas que no vale la pena rescatar, de acuerdo a la dirección sectorial del Infonavit en Guanajuato, del total de casas que ha entregado el Instituto en el estado a través de créditos, hay 5 mil 434 viviendas abandonadas, la mayoría de ellas ubicadas en la zona de Salamanca Villa 400, considera una zona insegura. En este sentido, el presidente del consejo directivo de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) en Salamanca, Víctor Torres Nájera, informó que tras el abandono de viviendas que se registró hace cuatro años en colonias como Salamanca Villa 400 y Barlovento, poco a poco se han recuperado inmuebles, situación que se refleja en el aumento de la oferta y demanda de renta o venta, sin embargo, reconoció que aún existen algunos predios que son ocupados por personas en situación de calle o usados como sitio de disposición de residuos sólidos urbanos.
En contraparte, la zona poniente, es decir la zona habitacional de Arboledas de Ciudad Bajío, donde actualmente residen más de mil familias , se caracteriza por sus actividades habitacionales y una densidad de viviendas mayor de hasta 4 mil viviendas, en comparación con la zona centro o el oriente, contrastando también la menor presencia de actividades económicas orientadas a servicio y turismo.
En este aspecto, el Instituto Municipal de Planeación recomienda la implementación de una planeación estratégica, que incluye la rehabilitación de viviendas desocupadas, la reutilización de espacios comerciales y la mejora de infraestructura urbana, para albergar el crecimiento poblacional de manera ordenada y eficiente, cuyas acciones deben enmarcarse en un plano de sustentabilidad, sostenibilidad, gobernanza y equidad social.
En Salamanca no hay vivienda barata, los créditos a los que acceden los trabajadores promedio van de entre los 400 mil y 500 mil y no hay vivienda de esa cantidad, por lo que se van a zonas baratas, pero resulta contraproducente porque luego tienen que dejar la vivienda por la inseguridad o bien por falta de dinero para pagar.