Mujeres ikoots con diferentes ocupaciones a través de la Casa de la Mujer Indígena de San Mateo del Mar, atienden a jóvenes y adultos del sexo femenino de distintos municipios de la región del istmo, asimismo, brindan asesoría en defensa de sus derechos humanos y la no violencia.
Antonina Romero, colaboradora de la organización señala que además de apoyar física y emocionalmente a las mujeres huaves, se dedican al oficio de parteras y mejoran algunas lesiones de las personas. Manifiesta que estos conocimientos fueron heredados por sus abuelas y madres, hecho que les ha beneficiado para continuar impulsando el proyecto desde hace más de 40 años.