Cierra penal de Ixcotel tras seis décadas de operación

La Penitenciaría Central de Santa María Ixcotel, Oaxaca, que durante casi seis décadas representó el centro de reclusión estatal con mayor población privada de su libertad, cerró sus puertas de forma definitiva.

"Donde había 906 personas privadas de la libertad, de las cuales 806 trasladamos al nuevo penal de Tanivet, este que se puso en operación en el gobierno de Alejandro Murat y trasladamos otro grupo de 50 a Etla y otros 50 a Miahuatlán, esto forma parte pues de un proceso previamente acordado con la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana en estos acuerdos de coordinación en busca de la reinserción social y del control penitenciario que estamos buscando" expresó Ernesto Salcedo, Secretario de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO).

Este penal, ubicado en el municipio de Santa Lucía del Camino, conurbado a la Ciudad de Oaxaca, mantuvo durante más de medio siglo una población penitenciaria que llegó a fluctuar entre los 900 y 1600 PPL´s, registrando así una sobrepoblación y en consecuencia condiciones de hacinamiento.

Este espacio que albergó a miles de Personas Privadas de su Libertad, fue adaptado como centro de reclusión a mediados del siglo XX, luego de haber sido construido como cuartel militar.

"Era evidente pues que había un proceso irregular, áreas vulnerables del proceso penitenciario que evidenciaban que había un círculo delictivo, un proceso delictivo ahí que por más operativos que se vienen haciendo a lo largo de los años pues siempre encontraban la manera de seguir introduciendo estos objetos y sustancias, de tal suerte que teniendo la oportunidad de hacer una mejora sustantiva en el sistema penitenciario de Oaxaca y que consideramos que tenemos como ventaja este nuevo penal de Tanivet que consideramos como está demostrado que es uno de los mejores penales en el sureste del país, debidamente equipado, con los protocolos, con las certificaciones, pues no había razón para seguir manteniendo la operación de Ixcotel".

De acuerdo con la reforma penal del año 2008, el sistema penitenciario en México debe cumplir con cinco ejes de reinserción social: salud, educación, capacitación para el trabajo, deporte y derechos humanos.

Sin embargo, las condiciones que vivía la mayoría de la población penitenciaria en este penal, distaban mucho de lograr esa reinserción social.

"Las condiciones pues de insalubridad, los espacios inadecuados, los daños estructurales del inmueble, son dos de las causas principales, que los inmuebles que han sido cerrados no garantizan la seguridad estructural y las condiciones de salud, de control penitenciario y de reinserción social".

En la presente administración estatal, que encabeza el gobernador Alejandro Murat Hinojosa, respetando el marco legal y cuidando los protocolos de derechos humanos, las autoridades de Seguridad Pública, han llevado a cabo el cierre de tres penales regionales que son el de Matías Romero, Pochutla y Juchitán y ahora se sumó también la Penitenciaría Central de Santa María Ixcotel.