La red carretera de un país es fundamental para su desarrollo y crecimiento, posibilita el transporte de personas y de cargas, satisface las necesidades básicas de educación, trabajo, alimentación y salud, temas esenciales en el propósito de mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
En Oaxaca, la red carretera está conformada por 24,836 km, de ellas, poco más de 3 mil kilómetros son carreteras federales, así como 5,291 kilómetros de carreteras estatales o alimentadoras, el resto, más de 16 mil kilómetros está conformada por caminos rurales y brechas.
Ahora el enfoque está en las autopistas, la reducción de tiempo y gastos de traslados, el objetivo, garantizar tanto a la población, como a los inversionistas, mejores condiciones, ¿se logrará?
El pasado 4 de febrero, fue inaugurada por el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador, la autopista Barranca Larga - Ventanilla, que permite conectar a la capital del estado, con la región de la costa, en tan solo 2 horas y media, abriendo una gran oportunidad de crecimiento y derrama económica, sin embargo, a horas de su apertura, iniciaron los cierres, a través de bloqueos carreteros, los cuales se han vuelto un mal sin terminar en Oaxaca.
Hoy se lucha en dos frentes, concretar las inversiones de desarrollo del estado con mayor conectividad, pero también hacer valer el derecho del libre tránsito, de acuerdo a la Secretaría de Gobierno, durante el 2023, disminuyeron los bloqueos en 48 por ciento, al pasar de 788 en el mismo periodo de la administración anterior a 409 en ese año.
De esto, podemos concluir que pese a las intenciones gubernamentales y al recurso inyectado para proyecto de conectividad, aún falta mucho para consolidar las garantías necesarias, que permitan apuntalar el desarrollo, siendo uno de ellos, la atención de los bloqueos carreteros.