Elaboración de trenzas y accesorios: el trabajo de artesanos istmeños

La cultura istmeña mantiene gran parte de su esencia en su indumentaria, en el traje regional; sin embargo, son los accesorios aquellos encargados de complementar la imagen de la mujer istmeña, trabajo que artesanos han desarrollado por años.

"Hacemos los listones, se elaboran los listones, las flores de tela, se hacen los tocados, collares con cadena de aluminio, cristal y ahogadores de aluminio también", comentó la artesana Raymunda Jarquín.

De colores vivos, cálidos y brillantes, de distintos modelos, las trenzas se elaboran de manera manual en un lapso de una a dos horas, piezas que se vuelven exclusivas, pues el diseño proviene por completo de la inspiración de los artesanos.

En cuanto a los accesorios que tampoco pueden hacer falta en la vestimenta istmeña, destacan los ahogadores, brazaletes y pulseras, que, aunque al paso de los años el uso de piezas de oro se ha ido reduciendo, los artesanos han encontrado opciones con el cual, los elementos característicos se siguen preservando.

"Nosotros tenemos el aluminio, y compramos las monedas de aluminio y los armamos, lo vamos pegando, armando y hacemos lo que es un ahogador, pero es todo de aluminio, ya no se oxida, pero es un trabajo artesanal, nosotros lo hacemos, los aretes también de monedas", explicó.

Como una opción económica, donde las piezas más elaboradas van de los 200 a 600 pesos, pero también pueden encontrarse accesorios desde los 20 pesos; quienes han dedicado su vida a esta actividad, manifiestan realizarlo como una forma de preservar la cultura del lugar que los vio nacer.

" Nosotros hacemos todo este trabajo artesanal para no perder nuestras raíces, esto es algo muy bonito que si lo dejamos vamos a perder todas nuestras raíces que traemos de años atrás fomentando", expresó la artesana originaria de Salina Cruz.

Una actividad económica que refleja el amor y dedicación de los artesanos, que adorna los mercados, pues el colorido y brillo de las piezas elaboradas salta a la vista, busca mantenerse vigente también en el día a día, con accesorios y piezas de carácter istmeño que se pueden portar de manera cotidiana.