Docentes y directivos que se mantienen a casi un año del sismo de 8.2 grados, laborando en aulas provisionales, luego de resultar afectados sus edificios educativos, detallan que este inicio de actividades pinta un panorama complicado, esto al señalar que la gran mayoría de las aulas presentan afectaciones.
En el caso de las instaladas en el campo blanquito del puerto de Salina Cruz, Juan Carlos Orosco director de la escuela secundaria Macedonio Alcalá, indica que las principales afectaciones se ubican en sanitarios, chapas y puertas, ventanas y en las paredes.
Manifiesta que en conjunto con el comité de padres de familia realizarán algunos trabajos de reforzamiento en las instalaciones, sin embargo argumento, es necesario que las autoridades y las empresas responsables de la construcción de las aulas acudan a darles el adecuado mantenimiento.
Una de las principales repercusiones ha sido la disminución de la matrícula escolar, así lo indica Juan Carlos Orosco, quien expresa el año pasado iniciaron con un promedio de 33 alumnos en cada aula de primer grado, cifra que a la fecha se estima inicien con un aproximado de 25 alumnos.