Desde que tenía 10 años, Sinar aprendió a hacer las escobas artesanalas hechas a base de palma, y con el paso del tiempo, esta artesanía se ha convertido el único sustento para su familia que se encuentra en Chicapa de Castro, Agencia Municipal de Juchitán, Oaxaca.
Su jornada comienza desde las 6 de la mañana, cuando sale de su casa para ir a obtener la materia prima en la zona del palmar en la vecina comunidad de Unión Hidalgo, Oaxaca, donde corta las ramas de los árboles.
Cuenta con con los desechos de las palmas que utilizan las artesanas, lleva a cabo la elaboración de este producto, que con el paso de los años fue perfeccionando, ya que se observa la habilidad en sus manos mientras lleva cabo los amarres.
El último paso para hacer la escoba, es emparejar la palma con su afilado machete, detallando esta pieza que aún se sigue utilizando en los hogares de las familias zapotecas de la región del Istmo de Tehuantepec.