Los simulacros en Oaxaca, como en muchas otras partes de México, son herramientas importantes para la preparación ante emergencias, especialmente dada la vulnerabilidad de la región a desastres naturales como temblores y huracanes.
Sin embargo, su implementación y efectividad son a la fecha cuestionables, por ejemplo las Inconsistencias en la ejecución cuando los simulacros no son bien organizados, lleva a confusiones sobre los procedimientos a seguir.
La alta de conciencia y participación es un factor clave, muchas veces la gente no toma en serio estos ejercicios y no está realmente preparada para actuar en una emergencia real donde los segundos son eternos, pero importantes para sobrevivir.
Particularmente en Oaxaca no todas las comunidades tienen las mismas oportunidades para participar en simulacros, cientos de poblaciones marginadas o rurales no reciben la misma educación y preparación que los más urbanizados.
A menudo, los simulacros se centran en temblores y desastres naturales, sin abordar otras crisis potenciales, como incendios forestales, inundaciones o emergencias de salud pública.
Pese al avance en cuanto a los atlas de riesgo en la entidad se continúa sin tener en cuenta las particularidades culturales y geográficas de Oaxaca replicando ejercicios demasiado genéricos, dejando de ser útiles para la población local.
Los municipios que cuentan con sistemas de alerta sísmica en áreas más propensas a la actividad sísmica incluidas las redes de monitoreo sísmico son:
Oaxaca de Juárez Heroica Ciudad de Huajuapan de León Juchitán de Zaragoza Salina y Tlacolula de Matamoros, este municipio también está incluido en los sistemas de alerta debido a su cercanía con fallas geológicas.
En Oaxaca zona altamente sísmica y donde la historia ha dejado huellas profundas a causa de la actividad tectónica, la respuesta de la población durante los simulacros deja mucho que desear.
Muchos ciudadanos consideran estos ejercicios como meras formalidades, perdiendo de vista su importancia vital.
Durante el último simulacro, varios participantes mostraron desinterés, conversando y tomando fotos en lugar de mantenerse atentos a las instrucciones de evacuación.
Además, las alertas sísmicas, aunque bien intencionadas, han demostrado ser insuficientes para generar una respuesta efectiva, un gran número de habitantes tampoco confía plenamente en ellas argumentando que en ocasiones se activan de manera intempestiva, generando confusión en lugar de tranquilidad.
Los reportes del coordinador de Protección Civil en Oaxaca Manuel Maza Sanchez al cierre de agosto de este 2024 refieren 5 mil 022 temblores, que equivalen al 26.49 por ciento de los registros a nivel nacional.