El plagio de los textiles y las artesanías de los grupos originarios del país, es un acto que ha sido recurrente, donde empresas prestigiadas de diversos países se apropian de los trabajos artesanales.
Entre las empresas que han sido denunciadas aparece Levi?s, Zimmerman, Antropology, Zara, Carolina Herrera, y la empresa Mexicana Modatelas, que han explotado de manera comercial el trabajo de las artesanas y artesanos.
La competencia desleal es uno de los impactos negativos de estos plagios, pero también los cambios que van estableciendo estas líneas de ropa, a través de las modas.
Los grupos étnicos con más plagios han sido los Mazatecos, Zapotecos , Mixtecos, Mixes y Chinantecos, y estos van teniendo un desplazamiento de sus conocimientos ancestrales.
El 22 de enero del 2022, entró en vigor la ley Federa de protección al patrimonio cultural, indígena y afromexicana, que regula y mandata a terceros ya sean personas fisicas o morales, diseñadores, talleres de fábricas que quieran hacer uso de sus elementos culturales.
Esta ley castiga hasta con 20 años de cárcel a quien reproduzca, copie, imite o se apropie de elementos del patrimonio cultural de los pueblos, y plantea las mismas penas para quienes distribuyan, vendan, exploten o comercialicen estos productos.
Sin embargo, a pesar de la existencia de la ley, en la práctica, no tienen ningún recurso más allá de la condena moral de la copia, ya que se tendría que acreditar la propiedad, que en la ley se estipula que incluye a descendientes, indígenas y artesanos.