Empresarios de la región del Istmo de Tehuantepec, se muestran preocupados, ante la facilidad que les ha brindado a los malhechores la medida sanitaria del uso del cubreboca para cometer sus delitos, al referir, que las persona ya no logra ser reconocidas y más si llevan gorra y lentes, escapando de las cámaras de seguridad.
Abimael Olivera Pérez, delegado regional de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), indicó que anteriormente los comerciantes y empresarios podían detectar algún escenario de riesgo si veían una persona con pasamontañas, cascos de motociclista, pañuelo en el rostro o algún medio que cubriera la identidad de la persona, sin embargo, en esta nueva normalidad, a nadie se le logra ver bien el rostro, por lo que los delitos se comenten con facilidad.
Una de las defensas que por años han tenido los empresarios y comerciantes, son los equipos de videovigilancia, mismos que hoy quedan obsoletos, ya que al dar parte a las autoridades resulta una tarea complicada poder tener una seña particular del delincuente, al menos que tenga algún tatuaje.
De acuerdo al delegado regional de la CANACINTRA, en la región del Istmo, el delito que más incremento ha registrado, es el robo en la vía pública.