En el mes de julio de 2024, el Museo de Arte Contemporáneo y de las Culturas Oaxaqueñas (MACCO), ubicado en el corazón de la capital oaxaqueña, fue reabierto al público, luego de 3 años de auditoria, inventarios y procesos legales.
Este espacio fue creado en 1992 bajo el ejemplo emblemático del artista plástico oaxaqueño, Francisco Toledo, con el objetivo de resguardar y difundir la obra de los más destacados artistas oaxaqueños.
En su archivo, contempla más de 500 obras, entre esculturas y pinturas, resguardadas durante casi 30 años, piezas valoradas en 20 millones de pesos.
El museo consta de 14 salas permanentes, con obras de Rufino Tamayo, Francisco Gutiérrez, Rodolfo Nieto, Rodolfo Morales, y Francisco Toledo, los cuales se exhiben permanentemente.
Hay un gran patio escultórico en el exterior del edificio, donde se realizan eventos como conferencias y conciertos.
Las exposiciones del museo varían periódicamente, mostrando tanto a figuras emergentes como a artistas establecidos. Su colección permanente incluye obras significativas de artistas contemporáneos, lo que hace cada visita al museo una experiencia única.
El Museo de Arte Contemporáneo no solo es un espacio para la apreciación del arte, sino que también es un importante centro de aprendizaje. Ofrece talleres y programas educativos para visitantes de todas las edades, promoviendo una mayor comprensión del arte contemporáneo