13 años se han cumplido desde que el Centro de Salud con Servicios Ampliados (CESSA) de Santiago Astata, inició su construcción y hasta el momento no ha sido entregado a la población, convirtiéndose en un elefante blanco más del sector salud a nivel estatal.
Los datos refieren, que la obra se puso en marcha en el mandato del exgobernador Ulises Ruiz Ortiz, pasando por diferentes administraciones quienes sólo le dan su "manita de gato", así lo refieren habitantes locales de la zona.
Santiago Astata, es una comunidad costera del Istmo de Tehuantepec, con una población promedio de 4 mil habitantes, que solo cuenta con un centro de salud básico para la atención de sus padecimientos, por lo que, en caso de requerir una atención médica mayor, tienen que acudir al hospital comunitario de San Pedro Huamelula o al hospital con especialidades de Salina Cruz, por lo que la necesidad de un centro hospitalario es alta, a pesar de ello la obra permanece en el abandono.
La infraestructura hospitalaria cuenta con área de urgencias, de cirugía, laboratorio, rayos x, oficinas administrativa y consultorios, considerado como un centro médico de 6 camas.
Noé Onofre Fermín, personal del ayuntamiento municipal, indicó, que en repetidas ocasiones han solicitado al Gobierno Estatal, que se ponga en marcha la unidad médica, pero estos responden que no tienen recursos; la demanda ya fue expuesta al presidente de México Andrés Manuel López Obrador, en una de sus visitas al estado de Oaxaca, quien canalizó la necesidad con personal del INSABI, pero estos indicaron que nada pueden hacer ya que la obra es estatal.
La urgencia de poner en operación toda la infraestructura hospitalaria abandonada, crece con la pandemia del Covid-19, ya que en esta tercera ola de contagios, son las comunidades pequeñas quienes más se han visto afectadas, mismas que no cuentan con hospitales adecuados para su atención, por lo que se tienen que quedarse en casa y confiar en Dios.