Alexander G. M., un joven de 16 años que aparentemente vivía en Estados Unidos, murió el martes por la noche presuntamente al recibir disparos de un policía en el municipio de Acatlán de Pérez Figueroa en la Cuenca del Papaloapan, casi frontera con Veracruz, cuando se dirigía a la tienda.
La Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) a través de un comunicado confirmó esta tarde de miércoles el homicidio del joven sin dar mayores detalles y el ayuntamiento de Acatlán de Pérez Figueroa presidido por Adán José Maciel Sosa, indicó en su página oficial de Facebook que el agente involucrado en los disparos ha sido puesto a disposición de las autoridades para aclarar lo sucedido, aunque, en un breve mensaje, descartó que se tratara de un ataque intencionado.
De acuerdo a los familiares, el joven asesinado tenía documentación del estado de Carolina del Norte y según medios locales estaba visitando a su familia y fue agredido cuando iba con unos amigos a una tienda.
La embajada de Estados Unidos no contestó de forma inmediata si se trataba de un ciudadano estadounidense o de un residente y la Fiscalía tampoco dio explicaciones sobre la motivación de los disparos.
Durante los últimos 12 meses, Acatlán de Pérez Figueroa se ha convertido en una zona difícil en temas de violencia y de atención prioritaria para las autoridades de Oaxaca, que lo consideran un municipio con altos índices de delitos comunes y con actividad del crimen organizado al tener límites fronterizos con el estado de Veracruz.
En esa región, donde operan distintos grupos criminales, entre ellos el Cártel Jalisco Nueva Generación, ha habido distintos operativos de la Guardia Nacional, el ejército y las fuerzas estatales para intentar abatir a la delincuencia.