Reformar la justicia mexicana es indispensable, pero uno de los debates que está en la base de la iniciativa presidencial del 5 de febrero, es la excesiva concentración en la elección por voto ciudadano que deja de lado aspectos que contribuirían a ampliar el acceso a la justicia para las y los más excluidos.
Oaxaca políticamente, se sumó a la mayoría calificada o plan C, tras los recientes resultados electorales, con ello también a la realización de los Foros sobre La Reforma al Poder Judicial, donde la presencia de candidatos electos por distintos distritos es fundamental, pues la entidad tiene más 400 municipios que se rigen por usos y costumbres y 19 grupos étnicos y afro mexicanos.
Se busca, entre otras cosas, reducir el número de integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y jueces, magistrados y ministros sean elegidos por voto popular.
También plantea, legitimidad democrática de impartidores de justicia, reformar el consejo de la judicatura federal, y órganos independientes para vigilar el desempeño judicial, con austeridad y transparencia en el máximo tribunal.
Para varios de los especialistas, vendría a desplazar la atención de problemas y situaciones que afectan realmente a la población más pobre, por ejemplo, respecto a la ampliación de los delitos que ameriten prisión preventiva oficiosa, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca Berenice Ramírez considera que deben tomarse en cuenta varios derechos humanos y éstos están por encima de lo que sea.
En el marco del Día nacional del Abogado, decenas de jueces y magistrados acudieron al Congreso de San Lázaro, en la Ciudad de México, para rechazar que los 1,700 juzgadores federales sean corruptos, además de defender la independencia judicial en México.