Tras una importante y larga temporada de sequía que se vivió dentro de la entidad Oaxaqueña y la región del Istmo de Tehuantepec, misma que mantuvo sin una gota de líquido el ojo de agua grande llamado la Crucesita de Santiago Laollaga; los primeros días de julio y con las recientes lluvias, el ojo de agua comenzó a formar pozas de agua.
A través de redes sociales, ciudadanos compartieron videos en donde se observa como el agua cristalina comienza a correr en los cauces de los ríos.
Cabe destacar que tan sólo el pasado 17 de junio, los cauces de este ojo de agua se encontraban completamente secos, situación que causo preocupación entre la ciudadanía de este municipio.
Este julio se cumple un deseo que se mantenía latente; volver a ver liquido en el ojo de agua mayor.