El suministro de agua potable en Salina Cruz sigue siendo un reto debido a su topografía irregular y a la elevación de la cadena de cerros que ha sido urbanizada en las últimas décadas de las últimas inversiones del gobierno federal fue en 2017, cuando se otorgaron 40.2 millones de pesos para el proyecto de agua potable en Salina Cruz, incluida la construcción de 4 pozos profundos y 12 km de tubería para que el 80% de la población de Salina Cruz tuviera un servicio eficiente.
Un estudio del "Atlas de Riesgo de Salina Cruz 2024" reveló que el desabastecimiento no se debía a la falta de extracción, sino a pérdidas del 43% en el sistema de distribución. Además, el Huracán John, en septiembre de 2024, exacerbó la situación, pues las infraestructuras locales no pudieron manejar el volumen de agua que cayó, dejando a muchas familias sin acceso al recurso.
Con un aproximado de 70 comités de colonias reconocidas, es como se administra el pago del vital líquido, acompañado de las cuotas existentes en los medidores que solo están instalados en los servicios comerciales donde las cuotas por tener agua van de los 30 a 40 pesos máximo por mes, mientras que para establecimientos industriales las tarifas son fijas, en ambos casos se estima que solo el 5 por ciento cumple con sus pagos.
La distribución de agua potable es insuficiente, considerando el inicio de la construcción de proyectos federales en 2020, como las vías del tren y el rompeolas con ello el aumento de constructoras, viviendas, empresas etc. Donde los 380 litros por segundo, para una población distribuida en 90 colonias es escaso.
Al revisar los datos sobre las partes altas del puerto, se considera que cuando menos existen alrededor de 50 tomas clandestinas por colonia, una realidad difícil de revertir de no haber nuevas inversiones.
El puerto de las maravillas, tiene un serio desperdicio de agua pues entre el 50 y 70 por ciento se desperdicia en las fugas subterráneas que no son detectadas y van directo a los drenajes, donde es el centro y colonias aledañas donde se agudiza el problema.
Para este 2025 y con los cambios políticos registrados en las administraciones de agua, poco se ha informado sobre los proyectos o gestiones con el gobierno estatal y federal para mitigar la escases que seguramente se agravará durante los meses de estiaje y altas temperaturas, por lo que seguramente los ciudadanos y empresarios tendrán que seguir comprando agua a través de pipas con precios sin control.