El embarazo adolescente es una problemática que azota a América Latina y el Caribe, donde se estiman 66.5 nacimientos por cada mil niñas de entre 15 y 19 años, de acuerdo con el Informe de Consulta Técnica del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Estas cifras revelan una realidad: miles de niñas viven en el país, donde desafortunadamente Oaxaca destaca por su número de casos.
El sistema patriarcal, el contexto multicultural y multilingüe, las desigualdades hacia las mujeres en cuanto a la educación sexual y reproductiva, son unos de los factores que propician una alta tasa de niñas de entre 10 y 19 años que se convierten en madres en Oaxaca, así lo señala un estudio realizado por el Centro de Estudio para las Mujeres y Paridad de Género en conjunto con el Honorable Congreso del Estado Libre y soberano de Oaxaca.
Se destaca que, a nivel nacional, sólo el 1% de los recursos para la infancia, están destinados a la prevención y protección del abuso sexual y la explotación.
En cuanto a Oaxaca, del año 2011 al 30 de junio del 2017, más de 78 mil menores de 19 años tuvieron un embarazo temprano, durante el 2020, más de 6 mil jóvenes del mismo rango de edad se convirtieron en madres, mientras que en lo que va del 2021, se acumulan más de mil 200 casos.
El estudio también revela que la edad promedio de la primera relación sexual en las adolescentes oaxaqueñas es de 17.7 años, donde el 14.8% no usó algún tipo de método anticonceptivo en la primera experiencia sexual.
En las estadísticas presentadas por la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), los municipios con más números de nacimiento en mujeres de 10 a 14 años son 14, destacando en la región del Istmo los municipios de Salina Cruz y Juchitán de Zaragoza.
Las estadísticas muestran la problemática que debe ser atacada, no solo en el Estado sino también en México.