Sin cumplir un año en prisión preventiva, suman tres los exfuncionarios del sexenio anterior en abandonar el penal de Santa María Ixcotel, en Oaxaca, por decisión de los jueces del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
El primero se registró el 14 de mayo de este año, cuando el exsecretario de Finanzas, Gerardo Cajiga Estrada, logró que las autoridades judiciales le concedieran el arraigo domiciliario, después de haber sido aprehendido en septiembre de 2017, acusado de peculado por 100 millones de pesos.
Le siguió el extitular de la Secretaría de Finanzas, Enrique Arnaud Viñas, que abandonó el penal el 7 de julio, al lograr también el arraigo domiciliario por supuestos problemas de salud.
A estos dos se sumó apenas este martes el extitular de la Secretaría de Vialidad y Transporte, Carlos Alberto Moreno Alcántara, que también firmará una vez al mes ante el Ministerio Público, pese a haber sido aprehendido en noviembre por tráfico de concesiones y permisos, que originó un desvío de más de 5 millones de pesos por más de 500 concesiones de manera irregular.
El Fiscal General del Estado, Rubén Vasconcelos Méndez, precisó que el hecho de cambiar la medida cautelar de prisión preventiva a arraigo domiciliario, lo prevé el nuevo sistema de justicia penal.
Aunque estos exservidores públicos son acusados de delitos por los que pasarían al menos 10 años en prisión, apenas estuvieron unos meses en el penal de Santa María Ixcotel y hoy continúan su proceso gozando de prisión domiciliaria.
Esta situación pone en entredicho la actuación de la Fiscalía Especializada en Materia de Combate a la Corrupción, que no ha podido mantener a los exfuncionarios tras las rejas, como habían prometido en su momento las autoridades.