Los usos y costumbres, prácticas y tradiciones locales arraigadas en la sociedad mexicana, han desempeñado un papel clave en la vida cotidiana del país durante siglos, a pesar de la existencia de leyes civiles, en muchas ocasiones, estas prácticas han prevalecido en comunidades rurales y urbanas, dejando a las autoridades en un dilema sobre cómo abordar y respetar estas tradiciones.
Históricamente, los usos y costumbres han dominado sobre las leyes civiles en algunas áreas de México debido a en primer lugar, la falta de acceso a la educación y el conocimiento de las leyes civiles en comunidades rurales y marginadas.
Oaxaca, es de los pueblos con más cultura en el mundo el estado con más municipios, 570; le sigue Puebla, con 217; en tercer lugar, Veracruz, con 212.
Sin embargo, es necesario reconocer la figura del topil, una especie de autoridad comunitaria representativa enfocada a brindar apoyo ciudadano
El estado de Oaxaca cuenta con 3 mil 595 topiles de los cuales 448 ya recibieron capacitación, estos elementos provienen de 149 municipios de las ocho regiones que conforman la geografía oaxaqueña, sobre todo las que se rigen bajo el Sistema de Usos y Costumbres.
A la edad de 15 hasta los 25 años pueden desempeñar el servicio de topil, siempre y cuando conozca sus costumbres.
Los ciudadanos respetan su trabajo y colaboran con ellos, porque se trata de una costumbre bien arraigada, sin embargo, las autoridades consideran importante capacitarlos.
Para obtener los conocimientos elementales sobre temas de derechos humanos, así como el uso de la fuerza, legítima defensa, atención, conducción de personas, elevar el nivel de reacción en situación de riesgo, que conozcan cómo actuar y hasta dónde intervenir cuando se presente alguna emergencia.