En el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio que se conmemora cada 10 de septiembre, datos revelan la asociación entre una adicción a sustancias nocivas con el desarrollo de cuadros de depresión y tendencias suicidas en un paciente, por ejemplo, en el caso del Centro de Rehabilitación para Enfermos en Adicciones Tehuacán (CREAT), se estima que de cada 10 pacientes, al menos 8 llegan con problemas de depresión, tendencias de atentar contra su vida o con antecedentes de haber tenido intentos de suicidio.
Humberto Merino Hernández, coordinador de CREAT, externó que toda adicción está relacionada con la depresión, ya sea que la dependencia a sustancias nocivas desencadene el problema emocional o el cuadro depresivo, o el trastorno desencadene una adicción, pues una adicción conlleva desconexión entre el paciente y sus seres queridos.
En este sentido, entre los pacientes que el centro ha atendido se encuentran casos de mujeres que han intentado terminar con su vida con la ingesta de pastillas o el cuttying, mientras que los hombres lo intentan a través del ahorcamiento, sin dejar de lado que el seguir hundiéndose en la droga lo ven como una forma de acabar lentamente con su vida; a estos datos se suma que muchos intentos se llevan a cabo bajo el influjo de alguna droga.
Por ello la importancia de que las adicciones se combatan con un diagnóstico dual del paciente, es decir, atender la adicción pero también la salud emocional, trabajando no solo con el adicto, sino involucrando a la familia, lo cual en ocasiones se complica porque a raíz del hartazgo de llevar años luchando con la situación, el 50% de pacientes son abandonados por su familia durante su tratamiento, lo cual genera que al salir del internamiento y reintegrarse a su vida vuelvan a recaer.