Ante aumento de casos, restaurantes disminuyen su aforo al 80%

*Foto ilustrativa 

Ante el incremento de casos positivos a Covid-19, restauranteros en el municipio de Tehuacán se unieron a la autorregulación no sólo al establecer el uso obligatorio del cubrebocas entre su plantilla laboral, sino también tras reducir su aforo de operación al 80 por ciento.

Fue la noche del pasado 20 de junio, que la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) emitió un exhorto a sus afiliados para mantener el uso obligatorio del cubrebocas entre la plantilla laboral, protocolos de prevención a contagios y la reducción de aforo de operación al 80 por ciento, "es un compromiso voluntario para disminuir la probabilidad de contagios que orillen a medidas más drásticas que no sean voluntarias sino obligatorias", comentó Juan Manuel Méndez Lezama, representante de la CANIRAC y de la Asociación de Restauranteros en Tehuacán.

Detalló que de los 24 restaurantes afiliados a la cámara, hasta el momento más del 50 por ciento aceptó voluntariamente reducir su aforo de operación y mantener el uso obligatorio del cubrebocas entre sus colaboradores, y además, promover campañas de concientización sobre dicha medida preventiva entre los comensales, ya que 5 de cada 10 ingresan a restaurantes portando cubrebocas.

Así, una de las prácticas que buscarán reinstalar entre los comensales es el ingreso a los restaurantes, portando cubrebocas el cual puede ser retirado durante la ingestión de alimentos para luego colocarse durante la sobremesa. Mientras que las medidas de control sanitarias de ingreso se mantendrán, al igual que la colocación y disposición de cubiertos y demás enseres en las mesas. Así como el equipo de protección personal de los colaboradores en la cocina será renovado periódicamente, siendo una norma permanente para el desempeño de su trabajo.

Finalmente, consideró que aún con la limitación de aforo, la recuperación económica del gremio, que actualmente se encuentra a un 80 por ciento, comparada con los registros antes de la pandemia; no se verá frenada, puesto que se trata de la implementación de un sistema ya antes utilizado -durante el confinamiento y la restricción total de las actividades económicas, turísticas, culturales, deportivas y sociales-.