El aumento del 20 % al salario mínimo a partir de este 2020 es algo que será irreal e inexistente en comunidades indígenas de Tehuacán, sobre todo aquellas enclavadas en la Sierra Negra, en donde los 123 pesos diarios designados por ley no llegará a jornaleros y campesinos debido al cacicazgo y la falta de intromisión gubernamental, así lo consideró José Luis Leyva Machuca, líder del Movimiento de Autogestión Social, Campesino, Indígena y Popular (MASCIP).
Es necesario, agregó, que las autoridades conozcan la organización de origen de los pueblos, pues los trabajos en el campo no tendrán una mejora únicamente por un acuerdo en papel, sino mediante políticas públicas que apremien las rutinas laborales y valoren la producción en las comunidades sin intermediarios.
Será a partir del 1 de enero de 2020 cuando el tabulador nacional se actualice a 123.22 pesos por día como salario mínimo de todos los trabajadores en el país, aunque para el líder de MASCIP se trata de una estrategia de los sistemas neoliberales que dan y quitan al mismo tiempo con la ilusión de mejorar las condiciones de vida.
"Son los campesinos los más afectados, a ellos quién les va a aumentar el salario, ¿el patrón?, claro que no. Quizá en las zonas urbanas se dé eso, pero en la Sierra Negra ni siquiera se puede exigir un aumento porque no hay trabajo", declaró.