Luego de que la tarde del pasado lunes, mujeres del municipio de Tehuacán participaran en un tendedero de denuncias anónimas, colocando la foto de su agresor, frente al quiosco del parque Juárez; un promedio de tres patrullas de la Policía Municipal llegaron al lugar para llevarse a una de las participantes, identificada con el nombre de Grecia M. para presentarla ante el juez calificador, por haber sido señalada por difamar a un masculino de nombre Alejandro R., al colocar su fotografía con la leyenda "acosador". Activistas y abogadas reprobaron los hechos, señalando que la mujer no cometió ninguna falta, pero las autoridades cometieron violencia institucional (simbólica) en contra de la mujer.
Sandra Paola de la Garza Mendoza, activista en pro de los derechos de la mujer, abogada y especialista en derecho penal, abundó que, el argumento de la detención de la mujer, por las autoridades municipales, es inválido, ya que el delito de difamación está derogado del código penal del estado de Puebla; y que para llevarse a una persona detenida se requiere de una orden de aprehensión (proceso extenso, que no se resuelve en horas), o de los supuestos de flagrancia o de caso urgente (cuando el señalado por la comisión de un delito, puede escapar), pero en ambos de los casos no aplica, porque "nunca existió ni existe un delito que perseguir"
Las mujeres ahí reunidas no estaban realizando ningún daño, no estaban en una situación de iconoclasia, estaban participando en una actividad de libre expresión; el problema fue el mal actuar de las autoridades, consideró.
Además que lamentó que en una manifestación pacífica, que si bien incomoda a la sociedad y a los ahí aludidos, las autoridades estén más preocupados en el que, y no el en porqué, pues la mayoría de las mujeres víctimas de algún tipo de violencia prefieren no denunciar, ya que muchas de las denuncias se quedan impunes, y más si existe intimidación de quienes deberían procurar la justicia y guardar el orden.
"Reflexionar que eran un promedio de 8 oh 10 policías, que evidentemente superaron en número a la mujer... hay muchos actos violentos que se pasan por alto y me parece reprobable, que los policías estén más preocupados en llevársela, que en las denuncias públicas que las mujeres estaban haciendo"; añadió que este, es un claro ejemplo de una violencia poco abordada: la institucional.