Año con año la corriente de agua de las lluvias arrastra tierra, basura y escombro hacia la parte oriente de la ciudad, afectando a las últimas casas ubicadas en la zona baja del fraccionamiento La Herradura, esta situación sucede debido a que los propietarios de una granja avícola construyeron una barda perimetral que evita el paso del flujo, provocando que les entre el agua y lodo a los hogares que colindan con este predio.
Los afectados informaron que en cada lluvia fuerte ocurrida en la ciudad, siempre se ven afectados los mismo vecinos debido a que toda el agua busca ese cauce, además de que disminuyeron el tamaño de las rejas que existen, así mismo mencionaron que ante la falta de apoyo por parte de las autoridades municipales, los vecinos se ven obligados en contratar camiones para que saquen la tierra que se acumula en ese lugar.