La reparación de la red de agua potable en el bulevar de la avenida Francisco I. Madero en el municipio de Santiago Miahuatlán fue una de las principales promesas que llevó Jesús Ramírez -actual presidente de ese lugar- cuando fue candidato hace más un año; sin embargo, el lugar se encuentra como en un inicio, en abandono y empantanado por el agua que ahí se acumula.
Se trata de al menos tres fugas de agua que llevan más de seis años afectando a los pobladores del barrio San Miguel, y aunque se ha formalizado la petición a través de oficios hacia la dirección de Obras Públicas, es algo que no puede ser atendido por el paso de galerías filtrantes en la zona, pues se encarecen los trabajos, además de que representa un riesgo si no concreta.
Martín Manuel Jiménez Rosas, director de Obras Públicas en esa comunidad, indicó que la presencia de galerías los lleva a solicitar la intervención de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y a disponer de mayores recursos que lo que establece su techo financiero, por lo que técnicamente no hay avances en las reparaciones.
El bulevar se encuentra generalmente inundado, y es que la acumulación de agua por tanto tiempo ha convertido la zona en un riesgo en la vía pública, pues la nata de la maleza provoca que existan olores desagradables, generando preocupación entre los vecinos que entrada la época de calor temen la presencia de dengue.
Hasta ahora el ayuntamiento de Santiago Miahuatlán ha decidido implementar la distribución de agua potable en una tubería alterna, pero el encharcamiento, la contaminación y los riesgos sanitarios en este lugar continuarán al no disponer de una solución.