El Partido Independentista Puertorriqueño (PIP) convocó este sábado una manifestación para el próximo 8 de noviembre con el fin de protestar contra la aprobación del controvertido plan de reestructuración de la deuda pública de la isla.
La manifestación tendrá lugar frente al Tribunal Federal de Hato Rey en San Juan con ocasión de la celebración de la vista en la que la jueza federal Taylor Swain, responsable de la reestructuración, certificará el Plan de Ajuste de la Deuda (PAD).
El secretario general del PIP, Juan Dalmau Ramírez, llamó en un comunicado a la militancia del partido, uno de los tres principales de Puerto Rico, y a todos los sectores a participar en la protesta.
"Aquí nadie se quita, nadie se rinde. Todavía se puede insistir en un acuerdo que responda a los intereses del país, no de los buitres", subrayó Dalmau.
El responsable del PIP denunció que la aprobación de la ley que habilita el PAD, gracias al acuerdo entre los otros dos grandes partidos de la isla, es "la base para que el país se empobrezca aún más".
"Es imperativo que quienes condenamos la aprobación de esta ley salgamos a repudiarlo", señaló Dalmau.
También insistió en que, mientras el Estado Libre Asociado siga "bajo un sistema colonial", sus ciudadanos serán "víctimas del Gobierno de Estados Unidos y de sus cómplices en Puerto Rico".
"Urge elevar esta discusión al Congreso de Estados Unidos para que se encamine un proceso de descolonización acompañado de una verdadera reestructuración de la deuda en los términos que nos convengan a nosotros como país", concluyó.
El PAD se oficializó cuando el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, firmó el pasado martes el Proyecto de la Cámara 1003, previamente aprobado por el Legislativo, que propone recortar la deuda pública de más 70.000 millones de dólares a 34.000.
La Junta de Supervisión Fiscal (JSF), ente establecido por el Congreso en Washington para supervisar el impago de la deuda, advirtió que evaluará el texto para comprobar que efectivamente hace posible el Plan de Ajuste, ya que se introdujeron enmiendas respecto al documento inicial.
Este plan de reestructuración de la deuda pública ha despertado muchas protestas en la isla y sus críticos denuncian que llevará a una segunda quiebra y afectará a los sectores más vulnerables.