Ante el problema que prevalece en el museo de sitio de Coxcatlán, por el que ha prevalecido cerrado y sin mantenimiento, y ante los problemas de filtraciones, pisos en malas condiciones, riesgos estructurales, que ya presenta la Casa de Cultura "Aurelia Izquierdo de Bravo", autoridades municipales estimaron que no solo requieren la pronta intervención de la Secretaría de Cultura, sino también de poco más de 1 millón de pesos (mdp), para la rehabilitación de los sitios.
Pisos deteriorados y levantados, problemas en la red hidráulica, filtración en el techo, paredes dañadas, árboles que presentan un riesgo estructural, sótanos en malas condiciones, son algunos de los problemas que la Casa de Cultura "Aurelia Izquierdo de Bravo" en Coxcatlán de poco más de 94 años (fundada en 1928), y tras recibir trabajos de remodelación hace aproximadamente 6 años.
Emanuel Soto Herrera, regidor de Educación Pública, Actividades Culturales, Deportivas y Sociales en Coxcatlán, manifestó que el problema en el museo de sitio ya es "desesperante", puesto que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), continúa sin atender sus quejas; y aunque no existe un inventario actualizado del total de piezas existentes, tienen conocimiento que más de 15 de ellas se encuentran en bolsas y cajas sin el resguardo debido, puesto que están expuestas a la humedad, polvo e incluso les toca el sol en ciertas partes del día. Por lo que incluso pudieron haberse perdido.
"Ya muchas no son piezas como tal, ya son polvo de piezas, de las que se quebraron o se perdieron; estamos dispuestos a apoyar para la construcción de un nuevo sitio", otra de las razones por las que el inmueble ya necesita la intervención de las autoridades estatales y federales, así como una remodelación; y aunque, no han tenido un acercamiento con el nuevo gobernador, el estado a través de la Secretaría de Cultura conoce las condiciones en las que se encuentra el inmueble, ya que son parte de la red estatal de casas de cultura, dijo.
Sin embargo la remodelación exigida, también implicaría la intervención del INAH, ya que el inmueble tiene zonas protegidas por dicho instituto.