Las restricciones sanitarias por COVID-19 han afectado el ánimo social para las celebraciones de los festejos patrios, lo que conlleva a una reducción en las ganancias de negocios dedicados a la comercialización de banderas, sombreros, trajes típicos y demás adornos propios de septiembre.
Comerciantes en la calle Agustín A. Cacho, explicaron que el costo de los artículos patrios se incrementó para este año entre un 15 y 20 por ciento de parte de los proveedores; sin embargo, no puede haber un aumento sobre el valor real, pues el interés actualmente es bajo.
La mayor parte de estos productos llegan de la Ciudad de México, generalmente de importaciones chinas, algo que repercute en los costos tanto de inversión como de recuperación.
Para los comerciantes se trata de artículos no perecederos que pueden esperar el próximo año para exhibirse, pues el panorama no es alentador en este 2020.