El incremento de ambulantaje en el centro de la ciudad comienza a generar un malestar para los comerciantes establecidos, señalando que frente a sus negocios llegan a tener hasta 3 ambulantes, los cuales llegan a pagar desde los 50 hasta los 400 pesos en algunas zonas, de manera diaria, siendo este el motivo por el cual las autoridades no quieren quitarlos, porque se les terminarían dichos ingresos.
El no pagar renta, impuestos o empleados, es una competencia desleal para los establecimientos, por lo que solo piden a las autoridades aplicar el reglamento vigente y existente, para poder controlar esta informalidad, ya que han hecho mediante oficios las quejas de que los puestos les causan problemas, pero solo les dicen que luego lo verán y solo por uno o dos días los quitan y vuelven a permitirles que se coloquen, siendo un acto de corrupción por parte de la autoridad.