Fue en octubre de 2017 cuando se publicó el "Decreto de la declaratoria de Área Natural Protegida de Jurisdicción Estatal de la zona denominada Cerro Colorado", debido a su riqueza ecosistémica, paisajística, "histórica y cultural". La cual incluyó parcialmente a los municipios de Ajalpan, Nicolás Bravo, Chapulco, San Antonio Cañada, Santiago Miahuatlán, Vicente Guerrero y Tehuacán.
Dentro del polígono considerado como ANP se encontraron zonas conservadas que necesitaban de protección especial, mismas que abarcaban 4 mil 355 hectáreas, por lo que se contemplaron "zonas núcleo" para la preservación de los ecosistemas a mediano y largo plazo; para ello se pretendió el establecimiento de zonas de amortiguamiento (en una superficie de 29 mil 54 hectáreas).
No obstante, tras inconformidades de índole agraria, a principios de 2020 ejidatarios de la región, lograron la anulación del decreto y con ello la reposición de más de 33 mil hectáreas que componen dicha reserva.
Más allá de un escenario de disputa entre núcleos ejidales y autoridades, el Cerro Colorado es uno de los epicentros más importantes para las leyendas en Tehuacán, que tienen como base cruciales hechos históricos.
"Tenemos historias, leyendas basadas en hechos reales y experiencias, sobre todo las experiencias que nosotros, nuestros padres, nuestros abuelos suelen tener. A lo mejor no es tan paranormal como creemos o a lo mejor no es tan físico como lo pensamos", consideró Hugo, senderista y explorador de lo paranormal.
"El Cerro Colorado un Castillo de Gigantes"
Desde la época prehispánica hasta el periodo insurgente, el "Cerro Colorado" como epicentro de la vinculación entre "hechos o sitios históricos con relatos fantasiosos surgidos desde lo popular".
Por muchas décadas se creyó que dicho cerro se trata de un castillo, construido por gigantes, "por ello las paredes verticales que forman un foso y que al mismo tiempo sirven como muralla, lugar donde estos seres mitológicos se resguardaban, y de los que actualmente solo se pueden ver los restos de sus cráneos (las piedras redondas que se encuentran en la cima de esa elevación terrestre)".
Leyenda que se asocia al Siglo XV cuando los Tehuacaneros se refugiaron en el Cerro Colorado, luego que Moctezuma I. junto con sus huestes que iban a Juxtlahuaca, sitiaron Tehuacán; cabe resaltar que los nativos lograron defenderse.
"Entendamos que eso es de alguna manera legado, no solamente de quienes fueron propietarios y sus descendientes, sino de todos quienes vivimos en el Valle de Tehuacán, por lo que hay que conservarlo, es parte de nuestra identidad", indicó el Historiador y Gestor del Patrimonio Natural. Histórico- Cultural del Valle de Tehuacán, Jorge Gerardo Balderas Ortiz.
Aunque durante "La Conquista" el "Cerro Colorado prevaleció relativamente olvidado"; las leyendas que emanan de ese sitio han trascendido y perpetuado el imaginario colectivo en Tehuacán, e incluso entre ellas se han documentado casos reales, aunque con giros inesperados.