Dado al tiempo que requiere el desarrollo de la flor del terciopelo, que se utiliza en conjunto con la flor de cempasúchil para el adorno de los altares de día de muertos, desde hace unos días se inició la siembra de este cultivo, siendo del 20 al 25 de junio la fecha ideal para sembrarla, pues demora 4 meses en florecer.
No obstante, dado a los costos de inversión elevados, los cuidados, el tiempo que requiere y la humedad excesiva de la tierra por las lluvias, este año el número de hectáreas podría ser menor, pues menos agricultores están apostando por dicho cultivo.
Eliseo Ramírez, productor de flor de San Diego Chalma, señaló que el año pasado se sembraron de flor de terciopelo 10 a 12 hectáreas, pero este año podría ser solo de 5 a 6 hectáreas como máximo, pues no es considerado un producto tan rentable.
Explicó que esto se notorio porque ha estas alturas no hay mucha flor ya sembrada, y quienes tenían pensado sembrarla corren el riesgo de que ya no les alcance el tiempo, pues para que se de para la temporada de fieles difuntos debe sembrarse a más tardar el 2 de julio, en tanto que mientras haya lluvias no se puede sembrar por que el exceso de humedad en la tierra lo impide.
Comentó que para la siembra de la flor de terciopelo, en lo que más se invierte es en trabajos de deshierbe y personal, invirtiendo hasta más de 30 mil pesos por hectárea. En cuanto a la flor de cempasúchil refirió que esta se siembra hasta el mes de agosto, pues requiere menos tiempo para su desarrollo,