La reparación de los posibles daños ocasionados por el biodigestor de la empresa "Patsa", ubicado en la inspectoría de San Vicente Ferrer, no ha tenido mayores efectos, denunciaron vecinos de la zona, quienes consideran que la avícola evade el seguimiento a los perjuicios ocasionados ante la falta de presión y acuerdo con autoridades auxiliares y municipales de Tehuacán.
La tromba del 24 de abril pasado colapsó nuevamente algunas tuberías de este contenedor de materia orgánica, lo que provocó la salida de líquidos por calles de la inspectoría de San Vicente Ferrer, afectando a más de 800 viviendas.
Durante la noche, los colonos -cansados de este tipo de situaciones- exigieron una respuesta de la avícola, siendo José Gabriel Guzmán Cabrera, representante jurídico de la empresa "Patsa", quien se comprometiera a dar seguimiento a las solicitudes y demandas de las personas afectadas de manera directa.
En el diálogo con los vecinos, Guzmán Cabrera insistió en que la salida del agua de los patios donde se instala el biodigestor no correspondía propiamente al proceso de ese sistema, sino al cauce natural del agua de lluvia, lo que generó el reclamo de los vecinos ante la presencia de olores fétidos que se intensifican con mayor fuerza por la zona a todas horas.
Cinco días después del compromiso, habitantes de esa inspectoría de Tehuacán reclaman que se trata de un engaño por parte de los representes de la empresa, advirtiendo que de continuar el problema las acciones de protesta incrementarán.