Tras el caso de discriminación a un estudiante de bachillerato del Unidad Escolar Porfirio O Morales, activistas por los derechos de personas con capacidades diferentes han reprobado que en pleno 2023 se sigan dando casos de discriminación y atropello a los derechos de personas vulnerables, sobre todo al tratarse de una víctima que es menor de edad por que podría considerarse incluso como un delito.
Dulce Belem Zavala, activista y ex directora de Grupos Vulnerables de Tehuacán indicó que no e sla primer ocasión que se da un caso de discriminación en dicha institución educativa, puesto que, cuando fue funcionaria publica se recibio un caso similar, pero la madre desertó de la denuncia por temor a represalias, por lo que esta situación debe prende run foco rojo para que las autoridades tomen parte.
Señaló que la educación es un derecho humano para todas las personas y se debe garantizar el buen trato para los aprendientes, tras recordar que no todas las personas con discapacidad tienen la facultad para solventar instituciones o educación particular; por lo cual exhortó a las autoridades tanto educativas como gubernamentales a tomar cartas en el asunto y hacer lo pertinente para evitar que se repita una situación igual, indicando que para evitar que se llegue a actos de discriminacion tanto por maestros como entre compañeros, es indispensable un trabajo colaborativo entre padres de familia, instituciones y gobierno.