A través del Periódico Oficial del Estado, quedó publicado y formalizado el decreto del Ejecutivo, por el que declara Patrimonio Cultural Intangible del Estado de Puebla, el Mole de Caderas del Valle de Tehuacán.
La publicación fue realizada el pasado 18 de octubre de 2023, en la edición vespertina del Periódico Oficial del Estado de Puebla.
Fue el 22 de octubre de 2004 que también a través del Periódico Oficial del Estado, se publicó el decreto del Ejecutivo por el que se declaró al Festival Étnico de la Matanza celebrado en El Valle de Tehuacán, como Patrimonio Cultural del Estado de Puebla; por el valor cultural, tradicional y ancestral que representa, celebración que inicia cada año durante el mes de octubre, la cual tiene como objetivo la renovación de las tradiciones y costumbres, así como su preservación en el tiempo en las regiones y comunidades participantes del mismo.
Sin embargo en los últimos años, a nivel local ha sido poca la trascendencia que le han otorgado a dicho festival, por lo que incluso el ritual étnico inaugural ha sido tomado por el Gobierno del Estado.
En el decreto que reconoce al Mole de Caderas como Patrimonio Cultural, se indica que es necesaria la adopción de medidas concretas para salvaguardar las distintas manifestaciones culturales intangibles que poseen un significado y valor especial o excepcional para la sociedad poblana, al formar parte fundamental de su identidad cultural; tal y como sucede con la manifestación del Mole de Caderas del Valle de Tehuacán.
Fue el 15 de febrero de 2023 que el ayuntamiento de Tehuacán entregó un oficio para solicitar a la Secretaría de Cultura de Puebla, realizará los trámites conducentes para que el Mole de Caderas en el Valle de Tehuacán, fuera reconocido como Patrimonio Cultural Intangible. Por lo que la Secretaría llevó a cabo dos foros de consulta en dicho municipio, donde participaron comunidades de los municipios involucrados con las manifestaciones culturales, para poder llevar a cabo el trámite; con la actual declaratoria se reconocieron los valores culturales, históricos, y tradicionales.
En la declaratoria también se reconocieron los elementos mediante los que se materializa el platillo: espinazo y el juego de caderas del Chivo Cebado, además de los chiles costeño, guajiro, serrano y cuicateco, el jitomate, miltomate, ajo, cebolla, cilantro, guajes, hojas de aguacate, sal de Zapotitlán Salinas y elotes de la Sierra; y suele servirse con cebolla picada, naranja agria o limón, y puede ser acompañado con tortillas de maíz.