La lluvia del pasado viernes afectó los avances de obras públicas que habían pasado días sin atenderse, lo que atrasa aún más el desarrollo de los trabajos que, en su mayoría, superan los 30 días de rezago.
Lodo y taponamientos en algunas partes es lo que puede apreciarse en varias puntos de la ciudad que aún tienen pendiente la conclusión de pavimento y asfalto.
Y es que en algunas zonas, las precipitaciones arrastraron tierra y piedra que se utiliza en las obras, lo que dejó encharcamientos; los vecinos aseguran, además, que los días lunes no hay actividad laboral en dichos trabajos, por lo que por semana se avanza cuatro días.