Si bien se agradece que el estado invierta en obras públicas para Tehuacán, todas han tenido observaciones incluso desde que fueron anunciadas; tales como la rehabilitación del libramiento San Lorenzo-Tecnológico, el Rastro Intermunicipal de Tehuacán, la rehabilitación del boulevard Héroe de Nacozari y la Biblioteca Municipal Joaquín Paredes Colín; todas y cada una de ellas, para especialistas edificadores, carecen de los 4 factores para planificar el desarrollo urbano y de ejecución de obras públicas: el social, jurídico, técnico y económico.
Para integrantes del Colegio de Peritos y Edificadores de Tehuacán, las inconformidades sociales que han surgido en torno a las obras públicas ejecutadas por el gobierno del estado, derivan de la falta de planeación la cual debe integrar al factor social: es decir, si los ciudadanos están de acuerdo con la obra contemplada, si la necesitan; el jurídico, contempla la factibilidad de la ejecución de la obra en cuanto a términos legales (que la zona donde va a llevarse a cabo, no cuente con limitantes de esta índole).
Si lo que se proyecta es técnicamente factible: en materia hidráulica, de movilidad, agentes físico (características del suelo, entre otras)-sociales, además que el factor económico considere aprovechar los recursos públicos disponibles para garantizar la entrega de obras de calidad, eficientes que estén transparentemente presupuestadas y administradas a fin que no queden inconclusas, "porque se calculó mal el presupuesto y se escatimen en materiales de calidad. Se agradece el interés de destinar obras a Tehuacán, pero muchas veces se prefiere solo una obra y no 5, pero que esté bien hecha", añadió Luis Cortés Reyes, integrante del Colegio de Peritos y Edificadores de Tehuacán.
El descontento social que evidenció las deficiencias de la rehabilitación del boulevard Héroe de Nacozari -que de no atenderse en un futuro próximo el principal reto a enfrentar serán los baches e inundaciones-, no dejó de lado que en los trabajos del Libramiento San Lorenzo-Tecnológico no existe una priorización de peatones y ciclistas (ni una infraestructura adecuada para este último sector) de acuerdo a la pirámide de movilidad, además que el problema del Dren de Valsequillo continúa vigente.
Para el caso del Rastro Intermunicipal de Tehuacán, su ubicación sólo trasladó el problema de la colonia Benito Juárez, a una zona de crecimiento urbano y con fraccionamientos alrededor, que además requiere de un drenaje independiente a la red doméstica; mientras que al emplear una especie de como espejo, donde pretenden colocar el acervo de la Biblioteca Municipal Joaquín Paredes Colín, se genera una condición de riesgo no solo para el material bibliográfico de la misma, sino también para los usuarios, ya que genera un ambiente de extremo calor, explicó.
Consideró que la real prioridad a nivel local es la mejora de la infraestructura ya existente: como un programa de bacheo completo, la conclusión del colector pluvial, mejorar la red de cables para el alumbrado público que además contribuiría a la mejora de la imagen urbana, así como la colocación de nuevas luminarias en colonias o asentamientos humanos que presentan deficiencia en este servicio o que no cuenta con este, así como habilitar sistemas de captación de agua. "Si las obras públicas no se planean se vuelven en una ocurrencia".