Debido a que la producción artesanal de sal en Zapotitlán Salinas depende de los días soleados por que el proceso es con base en la evaporación del agua extraída de los pozos, la temporada de lluvias ha traído una afectación grave a esta actividad económica, estimando que por esta situación represente un 40% menos en la producción anual que se esperaba por la cooperativa Sal Oro Blanco formada por 19 productores.
Lorenzo Reyes presidente de la cooperativa y productor indicó que este 2023 ha sido un año muy crítico por el exceso de lluvias, tanto que en estos momentos la producción de sal está detenida en su totalidad puesto que incluso hasta los caminos para llegar a las salinas están intransitables.
Detalló que como cada año se esperaba la producción más fuerte entre abril y mayo, pero desde la mitad abril detuvieron la producción por que cayeron los primeros aguaceros, en tanto que tan solo por esos dos meses un solo salinero podía haber generado en 2 producciones un promedio de 14 a 25 cargas, y por toda la cooperativa un mínimo 250 cargas, las cuales se perdieron (no producidas por las lluvias) lo cual representa el 40% menos de la producción anual.
Otra afectación para los cerca de 80 prodcutores que hay en Zapotitlán, es que con las lluvias el agua de los pozos puede reducir su salinidad, por ejemplo si en temporada buena es de 40% baja a 25%, eso reducirá las cantidades de sal obtenidas.
Con ello ahorita que no hay producción, las familias llegan a conseguir un trabajo extra como sembrar, otros que aprovechan dar mantenimiento a las salinas, limpiarlas por qué con las lluvias se ensucian, hacer nuevos caños y sin dejar de mencionar que otros se dedican a acudir a eventos para vender y promover la sal de stock en las expoferias, por ejemplo ahorita estarán desde este viernes hasta el domingo en Iztapalapa en una feria de productos sustentables patrocinando la sal Oro Blanco, en espera de que con la canícula a mitad de julio, las lluvias paren y se pueda retomar la producción.