Durante los últimos meses, independiente a temporada de estiaje, se han vuelto recurrentes las denuncias por escasez en el suministro de agua potable, donde en la mayoría de los casos el OOSAPAT a justificado fallas en las bombas y pozos, sumando en lo que va del año, de 5 a 6 casos de bombas descompuestas que han generado afectaciones a la población, pues en algunas se requiere la reparación y en otras el cambio, trabajos que llegan a demorar cuando no se tiene el equipo en stock.
Al respecto, Jaime Joel Castañeda, titular de OOSAPAT, expuso que esta problemática se debe principalmente a que las bombas y equipos con los que trabajan los pozos de OOSAPAT son obsoletos, pues han funcionado por más de 7 años e incluso sin recibir mantenimientos preventivos, cuando cada uno debió recibir atención a los 3 y 5 años de antigüedad.
Argumentó que dado a las condiciones de desgaste de los equipos se está proyectando dar este mantenimiento preventivo a los pozos, sin embargo esto está programado para final del año 2023, iniciando primeramente con la rehabilitación de 7 pozos, y continuar con el resto paulatinamente, pues la inversión es considerable y son más de 30 pozos con los que cuenta el organismo, sin dejar de mencionar que en la rehabilitación también se contempla hacer el cambio de las bombas.
En este tenor, se informó que para la rehabilitación de un solo pozo se requiere destinar 100 mil pesos el mantenimiento, en tanto que la reparación de la bomba, puede ser desde los 30 hasta 130 mil pesos, agregando que en los 6 casos que han presentado fallas y se ha tenido que hacer el cambio, han requerido inversiones de 80 mil pesos.