Tras el anuncio del gobierno local para la remodelación en la zona de "Los Portales", el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que no se cuenta con ningún permiso solicitado en esa construcción del centro, incluida en el Catálogo de Monumentos Históricos de la ciudad.
El pasado martes 27 de octubre el ayuntamiento dio a conocer que las direcciones de Desarrollo Urbano, Turismo y Servicios Públicos Municipales iniciarían el rescate de este espacio con recursos públicos para darle una mejor vista al sitio; sin embargo, la vocería del INAH confirmó que no existe ningún permiso emitido hasta ahora sobre la zona a remodelar y desconoció si existe algún trámite que permita anticipar los trabajos.
La zona de "Los Portales" fue incluida desde el 27 de agosto de 2010 en el Catálogo de Monumentos Históricos de Tehuacán bajo la clave 211560010018, avalada por la coordinación nacional dependiente del INAH. Se conforma de 35 arcos frontales y dos laterales, todos de medio punto que se apoyan en pilares de sección cuadrada a lo largo de una parte de la calle 1 Sur y su construcción data del siglo XIX.
Cabe precisar que ningún sitio protegido por el INAH puede ser alterado en su construcción, aunque el argumento de remodelación del gobierno local se mantiene en el cambio del proyecto de imagen urbana.
Desde el Colegio de Peritos Edificadores de Tehuacán no se pudo obtener una opinión técnica sobre el caso, pues la mayoría de los miembros ha trabajado o trabaja directamente con el ayuntamiento en turno.
Omisiones que pueden causar sanciones
Un caso similar se vive tras la modificación que sufriera el edificio ubicado a un costado del ayuntamiento hace unos días, y es que la construcción conocida históricamente como El Chanet, es parte de los bienes inmuebles protegidos por el INAH en Tehuacán, que después de su difusión en redes sociales sobre los trabajos de obra civil, fueron suspendidas todo tipo de actividades por parte de la entidad federal.
El ayuntamiento ha omitido los permisos en ambas situaciones y los partícipes de dicha situación no terminan por esclarecer el rumbo a seguir en lo que puede ser un proceso legal y administrativo que amerite responsabilidades de servidores públicos.