A pesar que desde la temporada decembrina las buenas ventas para el sector restaurantero se habían mantenido, a partir de la tercera semana del año el sector restaurantero ha empezado a sufrir los estragos de la cuesta de enero y afectaciones por el encarecimiento de algunos insumos, de manera que ya se prepara el primer incremento en los menús de este 2023.
Para este inicio de año se han registrado diversos incrementos a causa de la inflación y en el caso de productos perecederos por los daños a cultivos ante las bajas temperaturas, de modo que algunos productos que han tenido incrementos, en casos extremos de hasta el 300 %, son aceite, harinas, cítricos, jitomate, legumbres, cilantro, granos y gas.
Dado a ello y como cada inicio de año ya se contempla la modificación de precios en las cartas y menús que cada establecimiento ofrece, que tomando como referencia el índice inflacionario el incremento será del 10 %, siendo este el primer incremento del año, pues en caso de que se requiera podría haber otro incremento para el mes de julio.
Independiente a ello, el sector también espera que para febrero se tenga un mejor panorama económico con la celebración del 14 de febrero, aunado a que después del invierno los precios de productos del campo se nivelan y posteriormente viene la Cuaresma, por lo que el 2023 se vislumbra con un crecimiento económico.