El caso de María del Rosario N., de 42 años, puede ser ejemplo de una lamentable realidad a la que están expensas prácticamente el 80% de las mujeres que posterior a terminar relaciones sentimentales, sus exparejas continúan acosándolas, siendo este el primer foco de atención al que debe ponerse mayor ahínco para prevenir un feminicidio.
Fue la tarde del pasado lunes, que sobre la calle 5 de Febrero y Pedregal de la colonia Santa Cecilia en la junta auxiliar de San Lorenzo, un masculino aparentemente movido por los "celos" asesinó de varios balazos a la pareja de su excónyuge, identificada como Lucio N., de 52 años e hirió de muerte a María del Rosario N., de 42 años; todo presenciado por la hija de la ahora occisa de 9 años de edad.
En muchos de los casos, las mujeres que son víctimas de agresiones físicas y el máximo de los grados de violencia "feminicidios", antes tuvieron que pasar por una o todas las formas de violencia, generalmente el acoso, mismo que no se encasilla únicamente en comentarios, miradas, gesticulaciones o ademanes lascivos, sino también se presentan en el hostigamiento y manipulación que sus exparejas ejercen sobre ellas, posterior al finalizar su relación.
Para especialistas, la condición de vulnerabilidad y riesgo de una mujer es alto, puesto que es común que las actitudes machistas, misóginas y/o violentas no solo sean toleradas, sino también no sean percibidas incluso por familiares, amigos o cercanos de la víctima, puesto que la misma sociedad ha normalizado la violencia incluso en las relaciones sentimentales, que es el espacio donde tanto un hombre como una mujer, deberían ser libres y seguros.
Coincidieron que otro factor que no debe dejarse de lado, es que con este suman 2 casos de menores de edad, que presuntamente presenciaron el homicidio de su madre, el primero de ellos un menor de aproximadamente 4 años de edad, quien aparentemente se encontraba en el domicilio donde fue hallada sin vida Alejandra N., de 29 años, el pasado 12 de agosto y de acuerdo a versiones de familiares, señaló a su padre quien presuntamente golpeo y privó de la vida a su madre. Mientras que 2 menores más resultaron "víctimas indirectas de feminicidio".
Sin que hasta el momento se haya hecho público que las autoridades les otorgaron la asesoría jurídica y asistencia psicológica permanente, además de algún tipo de subsidio económico para su educación y crecimiento.