Dos baches, comienzan a aparecer en la Avenida Juan Escutia, entre las calles Zaragoza y Amado Nervo. El primero se localiza justo afuera de una casa abandonada, frente a la entrada del ICATEN, parece que tras realizar la conexión al sistema de drenaje comenzó a haber un hundimiento ocasionando el bache, que además almacena el agua que baja de una tubería de una casa vecina. Por fortuna los conductores ya lo tienen en mente al circular por el lugar, lo esquivan y no representa mayor problema.
El segundo, se localiza poco antes del cruce con la calle Zaragoza, justo a media calle, aunque no es muy grande en extensión, sí es un obstáculo para los conductores que deben bajar su velocidad al transitar por el lugar. Se puede deducir por las marcas de la cinta de rodamiento, que anteriormente habían tapado ya un bache en esta área y el material está volviendo a desprenderse de a poco, por el desgaste que ocasionan los coches al transitar.