Debido a los efectos del cambio climático y la dificultad que se ha encontrado para el cultivo de algunos alimentos en Nayarit, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural trabaja en el estudio y establecimiento de frutales alternativos como el guayabo, una especie con alto potencial de rendimiento por su adaptabilidad en cualquier época del año. La dependencia federal señaló que el ambiente tropical de la entidad, acompañado de un esquema de manejo tecnológico, puede hacer del guayabo un cultivo altamente rentable y sostenible, a través de un manejo agronómico y tecnológico oportuno.
Aseguró que la cosecha entre marzo y abril es una oportunidad para que con este frutal, la entidad participe competitivamente en el mercado nacional e internacional, además de obtener productos sanos y de primera calidad para los consumidores.
En 2008 se introdujeron en el Campo Experimental Santiago Ixcuintla del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) diversos genotipos de guayaba de pulpa crema y rosa, preferentes en el mercado, mediante un esquema de manejo tecnológico innovador que recientemente se validó y que ahora se aplica en el estado. El esquema desarrollado en el Campo Experimental consiste, entre otras técnicas, en la poda de producción del huerto en octubre, junto con una poda fitosanitaria a finales de enero para abrir una ventana de mercado entre marzo y abril, meses en los que se oferta menos fruto. Para potenciar el rendimiento y calidad del fruto se estableció un tratamiento basado en la aplicación de N-P-K ajustado a las reservas del suelo, con base en el análisis de la tierra, un sistema de riego por microaspersión y para el control y prevención de plagas y enfermedades se alternaron productos sistémicos y de contacto, con bacilos.
Los resultados de la primera cosecha validaron que, con variedades como la Calvillo, el rendimiento por hectárea fue de 12.3 toneladas, 63 por ciento superior a lo obtenido por productores sin tecnología, a la par de que existen selecciones de guayaba de pulpa crema como S19 y S20, con alto potencial de rendimiento en la entidad.
Bajo estas condiciones será posible obtener mayor producción y rentabilidad, principales demandas de los productores, además de eliminar problemas de plagas, enfermedades y deficiencias nutrimentales, entre otros aspectos.
El sector agrícola en Nayarit está representado por cultivos cíclicos en el 60 por ciento de la superficie, el resto son perennes. De estos, el 39 por ciento son frutales como mango, aguacate, limón y plátano.
México cuenta con una superficie dedicada al cultivo de guayaba de 22 mil hectáreas y rendimiento promedio de 14.7 toneladas por hectárea, indicó la dependencia federal.
Resaltó que el volumen de producción nacional y su presencia en el mercado mundial son factores de éxito de la guayaba entre las frutas mexicanas, ya que en los últimos cuatro años, México escaló dos posiciones, para establecerse como el sexto productor mundial de este fruto.